La primera boda, el primer tocado
7 octubre, 2016
¡Estrenamos blog! Y no hay mejor manera de hacerlo que presentándonos como es debido. Contándoos cómo empezó esta aventura hace poquito más de un año.
Nuestros nombres son Mª Elena, Paula y Carlota. Madre e hijas, abogadas, y unidas, entre otras muchas cosas, por nuestro apellido, “Rebull”, de ahí el nombre de la marca.
Nuestra historia comienza hace dos años. Paula se casaba y no encontraba un tocado que se ajustase a su gusto y bolsillo. Los días pasaban y los nervios y la angustia aumentaban, por lo que a una semana de la boda, se nos ocurrió la idea de elaborar nosotras mismas su tocado y ramo de flores.
Paula tenía claro que quería el ramo y el tocado de paniculata fresca. Después de varios intentos, al fin logramos dar vida a su idea, y el tocado y ramo definitivos los tuvimos que elaborar el día anterior a la boda. Acabamos a las once de la noche y, como estaban elaborados de flor fresca, para que no se estropeasen, estuvieron toda la noche en la nevera…! Ahora, cuando lo recordamos, nos entra la risa… ¡Qué locura!
Pero fue esa locura, el inicio de un mundo nuevo para nosotras, el inicio de Rebull.
Ana Reyna Torroba, de A.R.T, nos maquilló a las tres. Sin duda la mejor elección. Además de ser una persona estupenda, desde la prueba de maquillaje sentimos una conexión increíble con ella, enseguida captó el estilo que Paula quería y el resultado no pudo ser mejor, un maquillaje muy fresco y natural.
El vestido que llevó Paula mientras le maquillaban, era de American Vintage.
La elección del vestido de novia fue de lo más complicado, fuimos a “tropecientas” pruebas, y en cada una de las pruebas Paula se quedaba con alguna idea, pero no sintió como “su vestido” ninguno de los que se había probado… Al final, ella diseñó su propio vestido y se lo hizo a medida en Lola Hurtado.
Paula llevaba pendientes de swarovski y el anillo de pedida, de oro blanco y diamantes de una joyería que conocen desde siempre.
Las sandalias, en tono marfil, eran de Benetton. Además, Paula tenía preparadas unas alpargatas color camel de Castañer para la fiesta, pero las sandalias resultaron ser tan cómodas, ¡que no se cambió de zapatos en toda la noche!
La ceremonia, en la Parroquia de Nuestra Señora de la Estrella, situada en Navalagamella, resultó ser muy emotiva. ¡Todavía se nos pone la piel de gallina cuando pensamos en ello!
La celebración posterior, tuvo lugar en la Finca “Cañada Real”, en el Escorial. Una finca con un precioso jardín que “por culpa” de la lluvia no pudimos disfrutar. Pero a pesar de la lluvia, el equipo de la finca nos dirigió fenomenal, y el famoso “plan b” que toda novia teme, salió de maravilla. No podríamos tener mejor recuerdo.
La Finca tiene una Carpa acristalada, que dio a la cena un toque romántico que nos encantó…
Paula se encargó personalmente de la decoración de la finca, alquiló manteles de lino en color tierra en NewWay y diseñó los centros de mesa con una de sus flores favoritas, la margarita salvaje.
Además, Paula le encargó a Maria Jesús Santos Heredero (licenciada en bellas artes e Ilustradora), el diseño y elaboración de los meseros, el tablero de mesas y el libro de firmas… El resultado no nos pudo gustar más!
Las invitaciones de la Boda y el diseño del sello, que se utilizó en los regalitos para los invitados, los diseñó una amiga. El resultado, tal como se lo había imaginado Paula, no pudo ser mejor.
El reportaje fotográfico fue realizado por José Fotografía y su equipo.
El video de la boda, por Doing Show, grandes profesionales que colaboran con Rebull desde sus inicios.
Y así fue, como un 19/09/2014, sin ser aún conscientes de ello, nacía una marca, una historia, una experiencia que desde luego, nos ha cambiado la vida.
Rebull, tomó forma meses después, tras el éxito que el ramo y el tocado de Paula tuvieron entre familiares y amigos.
Desde entonces, necesitamos diseñar, crear y dar vida a nuevos diseños para vosotras, porque, ¿qué seríamos nosotras sin vosotras?, vuestra sonrisa cuando llegáis al atelier y nos pedís asesoramiento, y vuestra SONRISA cuando veis vuestro Tocado terminado, ¡nos hace muy felices!
De corazón, GRACIAS, GRACIAS y MIL GRACIAS a todas las que habéis confiado en nosotras.
GRACIAS por convertir un SUEÑO en REALIDAD.